El estado actual de la Salud Pública es grave. Y las políticas de salud mental del actual gobierno de la ciudad, no constituyen una excepción, sino todo lo contrario. Al intento de cierre de los hospitales Borda y Moyano en 2008 y al escaso presupuesto, se suman hoy políticas represivas y avasallantes que apuntan al desconocimiento de los cargos directivos ocupados por profesionales concursados y/o elegidos por los mismos trabajadores, sustituyéndolos por otros que se encuentran alineados con el macrismo. Estas destituciones y reemplazos se han dado mediante amenazas y golpes a profesionales del Moyano y del Ameghino (entre otros).
Los funcionarios que vienen de la mano de Macri son quienes sostienen de una u otra forma las políticas de vaciamiento de la salud pública, y los intereses económicos de los laboratorios y prestadores privados. Son quienes intentan aplacar el padecer medicalizando a los sujetos, quienes van a ejecutar las políticas privatizadoras en cada hospital, deteriorando y restringiendo aún más la atención en salud, hoy sostenida a costa del trabajo gratuito. Ante ello, los trabajadores del Ameghino, del Moyano, y de todos los hospitales de la ciudad, vienen denunciando estas prácticas, dando debates y llevando adelante acciones para detener estos avances.
Contra estas politicas destructivas, creemos que un cambio requiere tanto exigir al Estado compromiso en el sostenimiento presupuestario de la salud pública, como trabajar cotidianamente por la transformación de las lógicas manicomiales que operan hoy en los hospitales, que reproducen prejuicios y prácticas deshumanizantes.
En contraposición, experiencias genuinamente desmanicomializadoras como lo son, entre otras, el Frente de Artistas del Borda, La Colifata y Cooperanza, constituyen un lugar de reconocimiento de las subjetividades de quienes residen en los hospicios, paso primordial a la hora de intentar transformar el modelo alienante que existe actualmente.
Los funcionarios que vienen de la mano de Macri son quienes sostienen de una u otra forma las políticas de vaciamiento de la salud pública, y los intereses económicos de los laboratorios y prestadores privados. Son quienes intentan aplacar el padecer medicalizando a los sujetos, quienes van a ejecutar las políticas privatizadoras en cada hospital, deteriorando y restringiendo aún más la atención en salud, hoy sostenida a costa del trabajo gratuito. Ante ello, los trabajadores del Ameghino, del Moyano, y de todos los hospitales de la ciudad, vienen denunciando estas prácticas, dando debates y llevando adelante acciones para detener estos avances.
Contra estas politicas destructivas, creemos que un cambio requiere tanto exigir al Estado compromiso en el sostenimiento presupuestario de la salud pública, como trabajar cotidianamente por la transformación de las lógicas manicomiales que operan hoy en los hospitales, que reproducen prejuicios y prácticas deshumanizantes.
En contraposición, experiencias genuinamente desmanicomializadoras como lo son, entre otras, el Frente de Artistas del Borda, La Colifata y Cooperanza, constituyen un lugar de reconocimiento de las subjetividades de quienes residen en los hospicios, paso primordial a la hora de intentar transformar el modelo alienante que existe actualmente.
Retomarlas podría ser un punto de partida interesante para convertir el sistema de salud mental en uno que complejice la concepción de la salud, en lugar de rotular, caracterizar, definir y aislar a aquellos que padecen.
1 comentario:
hola compañeros necios, desde ch consti, les mando un cuento que escribí el año pasado a propósito de la "desmanicomialización" de Macri. Es un poco loco, con influencias de Monty Phyton, o de Mister Bin, o de Chesterton, no se. Es un poco necio, asi que espero que les guste.
http://el-cielo-desde-la-tierra.blogspot.com/2008/10/el-sndrome-w-crnica-de-una-autoexclusin.html
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